viernes, 28 de agosto de 2015

UN ENCUENTRO SOBRE ARTE RELIGIOSO ANALIZA EN MOGARRAZ EL ESTADO DE LOS RETABLOS DE LA IGLESIA PARROQUIAL








En la soleada tarde del pasado lunes 24 de agosto en la Iglesia Parroquial de Mogarraz se ofreció a los vecinos y visitantes la oportunidad de conocer de primera mano la labor de restauración que se está desarrollando en el retablo del evangelio (lado izquierdo) en el templo parroquial. El evento llevaba por título “¿Qué es un retablo?”.
Carlos Ávila de la Torre, restaurador vallisoletano, lleva semanas de intenso trabajo junto a su equipo técnico. Ellos fueron quienes también en el verano de 2014 restauraron el retablo opuesto, en la Epístola (lado derecho), con agradecimiento de la comunidad parroquial que ve así revalorizada esta singular pieza de la tradición religiosa.
El restaurador comenzó hablando al público reunido en el templo acerca de los elementos básicos para conocer más de cerca lo que es un retablo. Sus materiales básicos y algunos detalles sobre la historia y la evolución. Se adentró en la particular labor que se está realizando en los retablos de Mogarraz. Terminó invitando a los presentes y responsables del templo a mantener unas condiciones mínimas de buen uso de las obras de artes. Pormenorizó los detalles sobre la adecuada ventilación, limpieza, temperatura, humedad y otra serie de puntos concretos que ayuden a conservar el retablo y otros elementos de culto de la iglesia.
A continuación Visitación Cascón Puerto, catedrática de Geografía, Historia y Arte, prosiguió el encuentro analizando otros detalles de los retablos ubicados en el templo de Mogarraz. Se centró esta vez en el altar mayor, su historia, la procedencia de las piezas y relató detalles acerca de personas donantes en siglos anteriores. Esa labor realizada en siglos precedentes ahora enriquece y embellece el templo serrano.
Gracias al interés y esfuerzo del Consistorio, y ayudados por la Junta de Castilla y León, los restauradores están centrados en el mencionado retablo del lado izquierdo en este verano. Es gemelo del restaurado el verano pasado y, aunque, ha sufrió ataque de xilófagos, las piezas son originales. Las labores se centran en recuperar la resistencia de la madera, y antiguo estilo que simula el mármol, eliminando la capa de pintura acrílica y purpurina superpuesta al original.
Si pasamos estos días por Mogarraz encontraremos el retablo desmontado para facilitar el tratamiento. Los restauradores lo han consolidado, lo han limpiado y se está eliminando la capa de policromía no original. Se unirán las piezas rotas y se asentará la policromía, aplicando una capa de protección. También está previsto aplicar un mortero de cal y arena sustituyendo al cemento y nivelar el banco pétreo. De esa forma se montarán de nuevo las piezas y se reingresará en su lugar de origen, en la iglesia mogarreña.

El retablo en estudio está realizado en el siglo XVIII. En él se ubica habitualmente la imagen de la Virgen del Rosario, escultura realizada en madera, figura “de vestir”, es decir, tallados únicamente rostros y manos. Acompaña el conjunto un excelente Niño Jesús de sabor realista y entrañable. Este no es el emplazamiento original del retablo en restauración, sino que fue trasladado y adaptado al muro tras la desamortización de Mendizábal en el siglo XIX. Fue entonces cuando se adosó al muro lateral izquierdo, sin cámara de aireación, como sí tiene el retablo mayor. Está realizado en madera de castaño, madera abundante en la zona, con decoraciones en aliso y que tras el aparejado fue dorado y policromado imitando mármol, al estilo neoclásico. Está formado por predela, cuerpo único rematado lateralmente por columnas y ático.